Mientras el gobernador bonaerense Axel Kicillof y su jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, reparten su tiempo entre la interna del Frente de Todos y las candidaturas para las próximas elecciones, el sistema educativo de la provincia queda en un segundo plano.
Eso se refleja por la situación de muchos colegios de los distritos que no pueden cumplir con el cronograma de clases previsto debido, entre otros temas, a los serios problemas de infraestructura.
Un ejemplo es lo que sucede en un establecimiento educativo de Lomas de Zamora que afecta a unos 4.000 alumnos de todos los niveles (Jardín de Infantes, primaria, secundaria y profesorado). Precisamente, el distrito que maneja Insaurralde como exintendente.
Se trata de la EES 21, conocida como la ENSAM (Escuela Normal Superior Antonio Mentruyt). Desde el 13 de marzo no se dictan clases como consecuencia a falta de agua, rotura de cañerías e inundación en la zona de baños.
Los padres de los alumnos no logran tener respuesta ni de las autoridades del colegio ni de las municipales. Solo reciben información de la suspensión de clases – que se va renovando día a día, por mensajes de grupos de WhatsApp o por lo que se publica en la página de la institución.
