Son muchos los desafíos que quedan por delante para el Ministerio de Economía de cara a las elecciones. Los vencimientos de deuda son uno de ellos y, en la carrera, habrá un obstáculo de gran magnitud. Julio presentará vencimientos de deuda por un total de US$23.901 millones en distintos instrumentos. En esos 30 días, el Estado deberá hacer frente a un monto equivalente a cerca de la mitad de la deuda tomada por Mauricio Macri con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La Oficina de Presupuesto del Congreso dio cuenta de este panorama, que concentra un tercio de los vencimientos de este momento a fin de año en el mes previo a las PASO, en un informe sobre la deuda pública. Entre los puntos más preocupantes se encuentra el pago que el Gobierno deberá hacer al FMI, en un contexto de escasez de divisas.
Sergio Massa continúa las conversaciones con el organismo para “rebalancear” el programa de pagos y desembolsos. Esperan tener un resultado para el 20 de junio, según fuentes oficiales contactadas por LA NACION. Esto es un día antes de que venza un pago por US$2713 millones al Fondo, que debería darse entre los dos días siguientes (21 y 22 de junio). Este es el mes en el que se dará el monto mayor de reintegros al organismo. Los otros dos serían julio y en octubre.
La montaña de vencimientos del séptimo mes del año, el anterior a la primera contienda electoral a nivel nacional, está compuesta por distintos instrumentos. En orden de cantidad, el equivalente a US$18.176 millones son títulos públicos en moneda nacional, US$2660 millones, en pagos al FMI, US$1152 millones en moneda extranjera, US$624 millones en adelantos transitorios al Banco Central, US$395 millones en deuda a otros organismos multilaterales y bilaterales de crédito y US$81 millones, en letras del BCRA.
Uno de los aspectos preocupantes de la deuda es que en julio habrá múltiples vencimientos de bonos vinculados al dólar o al índice CER, atado a la inflación (el que rinda más). La mayor parte de los vencimientos son, justamente, bonos duales. Los especialistas alertan por el nivel de indexación de la deuda pública, que ya ronda el 94%, según Portfolio Personal Inversiones (PPI).
Consultado por LA NACION, el Ministerio de Economía explicó que “no subestiman el delicado momento de la curva de deuda”, pero esperan poder patearla para 2024 y 2025, mayormente. Tendrán que evaluar qué instrumentos ofrecen y el perfil de los tenedores para afrontar cada vencimiento. Por caso, el lunes próximo habrá una desafiante, por cerca de $480.000 millones, que está en un 90% en manos de privados, mayormente fondos comunes de inversión y empresas.
Luego, vendrán otras dos licitaciones complicadas en junio, por el alto componente privado. Al Palacio de Hacienda no le preocupan tanto los de julio porque son, justamente, tenencia de sector público. Además, todavía les queda la bala de plata de un canje para ese mes, que se haría en junio.
El Ministerio de Economía no tuvo problemas en estirar esa deuda en los vencimientos de los últimos meses. Justamente, la semana pasada, hubo uno por $600.000 millones. El Tesoro captó financiamiento neto positivo por $170.000 millones, un rollover de 130%. “Este resultado se obtuvo colocando el 97% de los títulos indexados ya sea con ajuste por inflación o por tipo de cambio. El 40% de lo colocado fue explicado por el nuevo Bonte 25, que fue suscrito por los bancos, quienes luego pueden utilizar para integrar encajes”, explicó un informe de GMA Capital, del viernes pasado.
Los especialistas destacan con preocupación la cuestión sobre los bonos, ya que estos títulos públicos son suscritos con cada vez más frecuencia por los bancos. Algunos expertos alteraron en las últimas semanas por la alta exposición del sistema financiero al sector público. La integración de los encajes como porcentaje de los depósitos en distintos tipos de bonos pasó de 0 al 15,2% del efectivo mínimo entre abril de 2021 y el mismo mes de este año, según las estimaciones de GMA Capital en base a los datos públicos del BCRA. Antes de las modificaciones del Gobierno que incluyeron otros títulos, en 2018 comenzaron a integrarse Botes, a partir de cambios en la normativa durante la gestión de Macri, que continuaron estables en porcentaje en los últimos tres años.