Mientras el Frente de Todos (FdT) discute la mejor estrategia de campaña para encarar un 2023 que se le presenta cuesta arriba, que incluyen la suspensión de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y alquimias electorales como un eventual corrimiento de candidaturas, un grupo de intendentes peronistas del interior de Buenos Aires respalda a Axel Kicillof y su plan de ir por la reelección. Son la contracara de ideas que surgen en otras usinas de comandantes territoriales, donde agitan la chance de que el mandatario compita por la presidencia, liberando el hueco para que lo ocupe otro postulante.
“Apoyo la reelección de Kicillof. Su gestión en la provincia de Buenos Aires es una de las mejores desde la vuelta de la democracia”, dijo a Letra P el intendente de Villa Gesell, Gustavo Barrera. Además de valorar su gestión, el jefe comunal tiene una mirada estratégico electoral de la postulación: dice que “no hay otro compañero que tenga mejores condiciones” para retener el territorio.
En la misma línea se expresó el intendente Colón, Ricardo Casi. “Con Axel tengo una excelente relación; ha realizado una extraordinaria gestión, conoce como ningún otro gobernador la provincia de Buenos Aires, ha defendido los intereses de los bonaerenses, estuvo en los momentos más difíciles trabajando a la par de todos los intendentes y generando las condiciones para poner la provincia de pie y acompañar el desarrollo de los pueblos del interior. Acompaño su candidatura por la gobernación y todas sus aspiraciones”, dijo a Letra P el jefe comunal del distrito del noroeste bonaerense.
Estas voces se suman a las de más de una docena de intendentes -todos del interior- que en los últimos meses pidieron por la reelección de Kicillof. Días atrás, el intendente Ricardo Moccero (Coronel Suárez) dijo a Grupo La Provincia: “Axel Kicillof tiene que ser reelegido”, porque “necesita los próximos años para demostrar cómo se puede dar vuelta la provincia de Buenos Aires”. Entre otros, lo mismo manifestaron en el último tiempo Ricardo Alessandro (Salto), Alfredo Farias (Tordillo), Gustavo Cocconi (Tapalqué), Julio Marini (Benito Juárez) y Pablo Zurro (Pehuajó).
Kicillof le presta particular atención al interior de Buenos Aires. Hace tiempo que al menos un día de la semana lo dedica a recorrer distritos fuera del conurbano. Tiene un doble interés: equilibrar la siempre tensa relación con los intendentes del conurbano y reforzar esas secciones electorales que, pese a la poca cantidad de electores, está sobrerepresentadas en la Legislatura, territorios donde, además, la oposición pisa fuerte. Los intendentes necesitan mucho de la asistencia de la Provincia porque tienen menos poder recaudatorio y de fuego para plantar exigencias.
Además de las recorridas periódicas de Kicillof, el trabajo en el interior es reforzado por otros funcionarios y funcionarias provinciales. Tal es el caso del jefe de Asesores y mano derecha del gobernador, Carlos Bianco, que hace tiempo viene visitando el territorio en una combinación de gestión y rosca. También trabaja con este grupo de intendentes la vicegobernadora, Verónica Magario, además de la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez. La funcionaria comenzó esta semana una serie de encuentros con intendentes y dirigentes del interior divididos por sección. El primer encuentro fue con referentes de la Cuarta, la próxima semana será el turno de los de la Séptima y continuará hasta completar las restantes. (Letra P)
