Esta vez a raíz de una denuncia hecha por uno de sus propios certificadores, llamada Silvana Beatriz Prino, el juez Alejo Ramón Padilla a cargo del juzgado federal 1 de La Plata, citó a esta mujer el 12 de mayo próximo; para ratificar su denuncia y reconocer o desconocer su firma en cientos de fichas de adhesión que serían apócrifas.
Esto se desarrolla dentro del trámite del Partido Libertario de provincia de Buenos Aires para conseguir el sello electoral. Al parecer, las autoridades habrían utilizado una base de datos para llenar las fichas necesarias para conformar el partido, en lugar de hacer la campaña de adhesión que la Justicia requiere.
Prino, que estaba designada como certificadora, manifiesta que solo pudo hacerlo con alrededor de 360, de las más de mil que figuran en el expediente con su supuesta firma. Según esta docente de Berazategui, Bruno Galleni (apoderado) habría utilizado el usuario y contraseña de la denunciante para subir los datos de las fichas al sistema de la justicia electoral en su nombre (trámite obligatorio para los certificadores, paso previo a la entrega física de las adhesiones en el juzgado electoral).
Luego de ello, uno de sus supuestos cómplices (un integrante de la junta promotora y referente de Olavarría llamado Sergio Palahy), habría convocado a un grupo de personas del partido para llenar las fichas de adhesión falsas e imitar la firma de la denunciante.
Estas maniobras estarían orquestadas desde CABA por Nicolas Emma y ejecutadas en provincia por Alejandro Calandra (secretario general de la junta promotora), con la expectativa de contar con el apoyo público y explícito de Javier Milei en el futuro.
La junta promotora del Partido Libertario de la provincia de Buenos Aires (presidida "de facto" por 2 personas que nadie eligió), pareciera que intenta ganarle una carrera al kirchnerismo acumulando causas judiciales. Y aunque parezca increíble, varios miembros de esta junta que carece de papeles que avalen a sus miembros, tienen causas anteriores también.
El destituido de su cargo como juez Juan Facundo Dominoni (vicepresidente), arrastra media docena de denuncias de sus propios empleados cuando todavía estaba en funciones y por las cuales fue apartado del cargo, el supuesto presidente de 29 años y un currículum en blanco Lucas Gazzotti, una de acoso reciente, Sergio Palahy (vocal, ex empleado de la municipalidad de Olavarría en la gestión de Cambiemos), también tiene denuncias por violencia de género.
Ni hablar de Nicolas Emma (presidente del partido libertario CABA), el denunciado como jefe de la asociación ilícita, que arrastra una por usar una base de datos de una escribanía (donde anteriormente trabajaba), para llenar fichas de afiliación truchas de su partido, y causas por lavado de dinero.
La relación de la junta promotora de CABA con la de provincia de Buenos Aires, corresponde a una vieja maniobra que muchas personas intentaron y todas fracasaron en el camino: tomar el control del conurbano bonaerense desde una oficina de la capital. Al parecer el secretario general de provincia de Buenos Aires (Alejandro Calandra) sería el dueño del inmueble donde Nicolás Emma tiene su sede, de ahí su estrecho vínculo.
Desde Capital, Emma controla y apoya los movimientos de la junta que él mismo diseñó para manejar la provincia sin tener que dar explicaciones a nadie. Desde ahí también se intentó controlar y subordinar a los distintos distritos que estaban trabajando para llevar las ideas liberales a la política, pero la siempre curtida gente del interior lo impidió de nuevo.
Luego de la ratificación, seguirá seguramente el llamado a declaración indagatoria de los acusados, donde el juez evaluará si tiene suficientes pruebas para seguir con la causa y dictar la prisión preventiva o desestimarla. Con el panorama actual, daría la sensación que los próximos afiliados de esta junta tapada de causas judiciales van a ser únicamente convictos.
